Para muchos niños, comer un helado un día por la tarde o un vaso de leche fresca a la hora del desayuno les puede llegar a causar retortijones, gases y diarrea.
¿Qué es la intolerancia a la lactosa?
Es la incapacidad de digerir la lactosa, un tipo de azúcar que se encuentra en la leche y otros productos lácteos. Se presenta cuando el intestino delgado no produce suficiente enzima lactasa. Las enzimas ayudan al cuerpo a absorber los alimentos.
Este proceso puede provocar retortijones, dolor abdominal, gases y diarrea al cabo de entre 30 minutos y 2 horas después de haber ingerido cualquier alimento o bebida que contenga lactosa.
Señales de que su hijo es intolerante a la lactosa:
- En un bebé, en los primero meses de vida, es poco probable que desarrolle intolerancia a la lactosa.
- Distensión abdominal. Empieza a tener gases y ruido intestinal.
- Dolor y diarrea
- En caso de que el niño use pañal, la diarrea generalmente le causa rozaduras.
La intolerancia a la lactosa se puede controlar y se puede aliviar el malestar estomacal asociado a través de algunos cambios en la dieta. Si sospechas que tu hijo puede padecer una intolerancia a la lactosa, llame a su pediatra.
Si su hijo es intolerante a la lactosa es importante planificar una dieta saludable que contenga cantidades muy reducidas o nulas de lactosa. También le puede ayudar el hecho de ingerir alimentos que no contengan lactosa junto con otros que sí contengan.
Al hacer estas modificaciones es importante que su hijo ingiera suficiente calcio, contenido en alimentos como el tofu, las verduras de hoja verde, la leche sin lactosa y los zumos de soja enriquecidos con calcio.
Referencia:
Todopapas. (2018, 12 julio). Síntomas en niños intolerantes a la lactosa. Recuperado 16 enero, 2020, de https://www.todopapas.com/ninos/salud-infantil/sintomas-en-ninos-intolerantes-a-la-lactosa-9344